Con la llegada del otoño, los viveros se convierten en lugares clave para renovar y preparar nuestros espacios verdes. Esta estación es ideal para plantar bulbos que florecerán en primavera, como tulipanes, narcisos y jacintos, aprovechando la humedad del suelo y las temperaturas más frescas.

El trasplante de árboles y arbustos es una de las actividades más recomendadas en esta época, ya que el suelo, aún cálido por el verano, favorece el enraizamiento antes de las heladas invernales. Es también el momento adecuado para realizar podas ligeras y aplicar fertilizantes, fortaleciendo las raíces de las plantas para que enfrenten el invierno con más vigor.

Los viveros ofrecen una amplia variedad de plantas perennes que añaden color otoñal al jardín, como crisantemos, ásteres y violas. Además, el otoño es perfecto para rediseñar tus espacios, preparar el terreno y disfrutar del espectáculo natural que nos brinda esta temporada. ¡Es la oportunidad de cuidar y embellecer tu jardín para el próximo ciclo!